lunes, julio 19, 2010

PÁJAROS

Desconexión



Ayer fuimos a las Cíes, la verdad es que son divinas, pero... han perdido la magia, vale que fuimos en domingo y eso influye por la masificación, pero me pareció un parque temático con ausencia de espectáculos de las aves del lugar, aunque ya lo dan gratuitamente en cuanto abres el bocadillo.... (malditas gaviotas de rapiña!)
El caso es que ahora es un "mira y no toques", como si pasearas por un museo natural, como si lo natural fuese de plástico, algo ficticio, algo artificial.... Comprendo que sea por la protección del medio,... Todo guiado en caminos, toda la gente siguiendo una misma dirección,... desconexión borrega?
Me sentí caminando en una fotografía con alguien indicándome el camino...
Repito que comprendo la razón de que ahora sean así,... pero han perdido la magia.

domingo, julio 11, 2010

Gañanadas Coutianas.... II

Otra ACTUALIZACIÓN,... en fin.....
· LOBOFEROZ
Érase una vez un joven holgazán que por no esforzarse, se dedicaba a vender crack y cocaína, además de consumir.
Un día , mirándose al espejo, se dio cuenta de su extrema delgadez, que su atractivo juvenil había desaparecido y ya no podría engañar a nadie para sacar ningún tipo de beneficio, por lo tanto, jamás podría ser un gran mafioso.
Entonces decidió cambiar su vida y convertirse en un ladrón de primera, conseguir un gran botín y retirarse en una gran mansión el resto de su vida.
Anda que anda el joven toxicómano se encontró con una secretaria, larguirucha con gafas de pasta, cargada con sus papeles, carpetas y archivadores.
–Guapa, tengo hambre, dame una monedita… ¡o te pincho!
–Entonces, ¿tú quien eres?– preguntó la joven secretaria
– Soy “El Jossi”, harto de la mala vida de las drogas.
–Pues abre bien las manos, que te voy a dar todo lo que tengo.
“El Jossi” abrió las manos y la secretaria se subió a un peldaño y le arreó un carpetazo con todos los archivadores, papeles y demás que tenía encima, de tal manera que le rompió los dientes.
Cuando el joven recuperó el sentido vio a un adolescente comiendo un pastel en un banco.
–¡Eh, tú! Tengo mucha hambre, dame una monedita… ¡o te pincho!
Entonces, ¿tú quien eres?– preguntó el chaval.
– Soy “El Jossi”, harto de las secretarias y de la mala vida de las drogas.
–Pues abre bien la saca, que te voy a dar todo lo que tengo.
“El Jossi” abrió la saca y el chaval se acerco lentamente a su cara y de un golpe, le estampó su pastel con tanta fuerza, que consiguió que tropezase y se cayese por una zanja abierta.
Cuando el joven toxicómano pudo salir, se encontró con una vieja.
–Señora, tengo hambre, déme una monedita… ¡o te pincho!
–Entonces, ¿tú quien eres?– preguntó la abuela.
– Soy “El Jossi”, harto de niñatos, de secretarias y de la mala vida de las drogas.
–Pues vacía bien los bolsillos, que te voy a dar todo lo que tengo.
“El Jossi” confiado, vació todo lo que tenía y la anciana le pegó tal patada en la entrepierna que lo dejó mudo y pálido.
Aun no estaba recuperado del todo cuando se encontró con la panadera.
–Oiga usted, tengo hambre, déme una monedita… ¡o te pincho!
–Entonces, ¿tú quien eres?– preguntó la panadera.
– Soy “El Jossi”, harto de viejas, niñatos, de secretarias y de la mala vida de las drogas.
–Pues súbete en la furgoneta de reparto, que te voy a dar todo lo que tengo.
Cuando estaban llegando al centro, la panadera pensó:
Será mejor avisar para que mi compañera vaya preparando el saco con el dinero. Grita tú, que yo estoy afónica.
Dame el dinero– gritó “El Jossi”
En cuanto lo oyeron gritar, salieron los vecinos del barrio. “El Jossi” tuvo que escapar corriendo, porque sino, acababa despellejado y en la cárcel.
Y así se quedó para siempre “El Jossi” volando, soñando y sin su mansión.

Gañanadas Coutianas....

Chachonadas siderales para clase.... que poco me apetece hacer esto....
Actualizaciones de cuentos; hoy toca:
CAPERUCITA
Era una vez una niña muy mona. Su mamá se sentía muy orgullosa de ella. Su abuela, que se enorgullecía aun más, le hizo a caperucita unas “caperuzorejeras” y eran tan llamativas, que empezaron a llamarle Caperucita Roja.
Un día mamá le dio a Caperucita una bolsa con ropa para coser y/o quitar manchas difíciles para que le llevase a su abuelita.
Caperucita salio de camino hacia la casa de su abuela, que vivía al otro lado de la ciudad, y, por el camino, se encontró con un señor en un coche que le pregunto:
¿A dónde vas Caperucita?
–A llevarle ropa sucia a mi abuelita
–¿Vive muy lejos tu abuelita?
– Al otro lado de la ciudad
–Pues a mí me gustaría ver a tu abuelita – dijo el hombre– Yo iré con el coche, tú ve caminando y a ver quién llega antes.
El individuo llegó pronto a casa de la abuela y llamó a la puerta: [¡Meeeeeeeeeeeeeeeeec!]
–¿QUIÉN ES?– Gritó la abuela desde el telefonillo.
–Abuela abre, que soy Caperucita– dijo el hombre cambiando la voz – Te traigo la ropa sucia.
–Sube, te dejo la puerta abierta, empújala para entrar.
En cuanto entró en el piso de la abuela, se abalanzó sobre ella y la amordazó.
Al rato llegó Caperucita y llamó al timbre:
[¡Meeeeeeeeeeeec!]
–¿Quién es?–
Al oír el vozarrón del hombre, Caperucita se extrañó, pero recordó que la abuela a veces tenía carraspera y dijo:
–Abre abuela, soy Caperucita. Te traigo la ropa que me mandó mamá.
El individuo suavizó un poco la voz y chilló:
–Sube, te dejo la puerta abierta, empújala para entrar.
Al otro lado de la ciudad la madre de Caperucita se dio cuenta de que su hijita se había olvidado sus “Caperuzorejeras” cuando una alarma de socorro comenzó a sonar de dentro de ellas y un holograma surgió repentinamente plasmando la imagen de la abuela amordazada en casa. Su abuela había estado trabajando durante décadas para proyectos secretos del Estado y este aparato lo creo como un Gadget de seguridad puesto que se veía cada vez más mayor e indefensa.
La madre de caperucita se colocó en la cabeza las “Caperuzorejeras” y en los pies las “Pantuflyers” que la harían correr más rápida que la luz para socorrerlas.
En cuanto cruzó la puerta del portal de la abuela pudo coger a la niña empujando la puerta de casa, por suerte la abuela ya se había soltado y con las muletas lanzallamas tenía retenido al intruso.
La abuela se encargó de todo, y con su máquina del tiempo lo teletransportó a la prehistoria a un nido de Tiranosaurios.

sábado, julio 10, 2010

toc-toc quién fue? II

Ya estoy cansada de estar callada y quieta en la cama porque es la hora de dormir,... Escucho risas, los tenedores como se apoyan sobre los platos, la botella de Coca-cola cada vez que se abre y suelta el gas,...
Me aburro, araño la puerta del armario porque puede que ocurra lo mismo como con las piedras cuando cae el agua sobre ellas, y tal vez consiga que cambie un poco la forma de ese armario que parece sacado del camarote del barco de algún capitán soso y serio.
Los libros de Barrio Sésamo ya me los sé, los de los hermanos Grimm también, los otros no tienen dibujos y si quito los Pin y Pon para jugar me riñen porque dicen que no es la hora....
Busco el lado más frío de la almohada para apoyar mi cara, me subo los calcetines para que no se me escurran entre las sábanas y espero a que el no hacer nada, me guíe al camino del sueño,....
Ya es de día, como nunca bajo la persiana, la luz invade mi cuarto, y la música de papá suena de fondo, hoy ha puesto música clásica, le encanta enseñarme sus canciones y a mi me gusta cuando tararea, hace que coge una batuta y parece que dirige una orquesta.
Me levanto de la cama y tropiezo con los cojines, los dichosos peluches y bebés que los reyes, familia y amigos se empeñan en regalarme, y que al final su única función es la de quitarme el sitio en la cama cuando quiero acostarme o que los usen mis amigos cuando entran en mi habitación,... al menos los peluches los puedo amontonar y puedo tirarme sobre ellos cuando juego a lo bruto como dice mi madre.
Mi padre está preparando el desayuno, yo prefiero cuando me hace de cena un "pepito", de mañana toda la casa huele a leche, no lo soporto ¿cómo es posible que este alimento tenga tanta importancia? He intentado veces y veces tomarla sola, con miel, con azúcar, pero el resultado final siempre es el mismo: arcadas... Sólo me sabe bien con Cola-cao, el truco está en no calentarla mucho y no dejar que se forme esa maldita nata....
Me acerco a la cocina para darle los buenos días, me da un beso, mira mis pies y me regaña porque estoy descalza, pero es que las zapatillas me dan tanto calor.... además, tengo el dedo gordo agrietado y se me enganchan las pielecillas, y... no hay excusa que valga, tengo que ponerme las zapatillas.
En la mesa hay un montón de papeleo de papá y la máquina de escribir que a veces me deja usar. Me pongo delante imaginándome que soy una secretaria, pero me cuesta mucho marcar las letras en el papel, aunque da igual porque no sé lo que ponen...
El radiocassette sigue sonando y hay un hueco preparado para mí en el otro extremo con un tazón, galletas y un zumo natural de al menos 4 ó 5 piezas de frutas diferentes (zanahoria, ciruela, manzana y naranja es lo que más suele usar), cuando lo bebo siempre me deja espuma sobre el labio, me divierte pasar la lengua por el vaso para limpiar los restos que quedan.
Suelo tomar la leche chocolateada o con descafeinado después de mojar alguna galleta, pero nunca la acabo, porque no me gusta el fondo. Luego el zumo que es lo más rico. De todos modos, nunca tengo hambre cuando me levanto.
Es sábado, no tengo colegio y mamá trabaja, así que hoy papi se encarga de poner todo en orden.
Me hace mucha gracia mirarle las manos, están morenas todo el año, tiene unos anillos de oro gruesos y el meñique destaca sobre el resto porque siempre tiene esa uña más larga que el resto, no sé por qué, pero son más suaves que las de mamá, y por lo menos él no me clava las uñas cuando me viste, o no le huelen a lejía como a la abuela. Siempre están temblorosas, si no le conociera pensaría que le tiene miedo a todo, o que está congelado, pero no es así. Me peina con mucha paciencia, y tarda casi media hora en colocarme el coletero porque cada dos por tres, se le escapa algún mechón, lo que provoca tener que empezar de nuevo.
Yo le llamo “Papá Michelín” porque se aprieta mucho el pantalón y mi tío me enseñó que cuando se sienta le sale una chicha como al muñeco del anuncio de neumáticos. Mamá me dice que no le llame así, pero es que me parece muy gracioso. Siempre me canta la canción de los tres cerditos y me gasta bromas o me pone ropa suya para sacarme fotos y mandarlas a la familia de Madrid.
Iremos al Zoo, como cada vez que hace sol, la abuela nos ha mandado pan duro para los patos y ciervos, si me porto bien, a lo mejor, comemos pipas, y luego recogeremos a mamá para comer en casa.
Como ya empieza a hacer un poco de calor, hemos preparado unos polos de yogur de fresa, así que ese será nuestro postre y después del café, y de que mamá se saque el uniforme, nos iremos a pasear al parque para ir a los columpios, ver perritos y comer barquillitos.
Me gusta mucho esto, cuando los días se hacen largos y a las ocho de la tarde los pájaros trinan sin parar. Me gusta porque tengo más tiempo para dibujar, jugar, disfrazarme y mi abuela me deja ir de manga corta, aunque siempre tenga que llevar una chaqueta en la cintura porque ella siempre piensa que hace frío aunque estemos en verano con las temperaturas más altas.
Hoy llevaré la chaqueta puesta, pero estoy segura que mi madre me llevará otra por si tiene frío, mi padre siempre dice que, ella y la abuela, son tal para cual. Seguro que a papá le lleva otra porque le tiemblan las manos.

jueves, julio 01, 2010

Rainbow Water Balloon II


Rainbow Water Balloon II, originalmente cargada por photoboothguy.

Water Balloon rebound


Water Balloon rebound, originalmente cargada por BeninManc.